Como ya hemos visto en otras entradas al blog, las flores de
Bach, o esencias florales, nos ayudan a equilibrar los entados emocionales que
llamamos negativos, estos estados,
cuando son muy intensos o los mantenemos durante tiempo prolongado, pueden
producir síntomas no deseados, otros estados más profundos que pueden limitar
nuestra vida (depresión) o incluso desarrollar alguna enfermedad.
Hoy os quiero hablar del Mímulo, una flor pequeña pero que
tiene una “gran labor”, porque nos ayuda a superar los miedos cotidianos, y a
aceptar la realidad. En estos días estamos muy necesitados de comprender
nuestros miedos, la situación que vivimos así lo requiere, pero podremos
llevarlo de forma más saludable si aprendemos a reconocerlos y a darles la
utilidad que tienen para protegernos de la situación.
“Miedo a las cosas del mundo, a la enfermedad,
al dolor, a los accidentes, a la pobreza, a la oscuridad, a estar solo, ala
desgracia. Los temores de cada día. Personas que llevan sus miedos en secreto,
sin hablar de ello libremente con otros”.
E. Bach
El miedo es una emoción primaria que todos padecemos en
mayor o menor medida, necesario, con orígenes claros, lo que parecería una
defensa adecuada para superarlo, pero que sin embargo en muchas personas no es
así, en parte por lo que afirma E. Bach –la dificultad de comentar y compartir
con los demás aquello que sucede en el interior de la persona- en parte porque
pensar que esos temores tienen raíces profundas y, quizás, no se dedica
suficiente tiempo a la comprensión- uno por uno, si hay varios- de origen.
En muchos casos este tipo de personas, identificadas en este
estado emocional, y/o que su personalidad está muy relacionada con este tipo de
miedo, les resulta difícil identificar sus propios miedos, o temen contarlos,
porque en realidad como decía el Dr. Edwar Bach su origen es muy profundo o
viene de muy atrás. Para ayudar a estas personas, habría que acompañar a
entender el origen de su miedo, tratándolos con mucho amor y compresión.
La toma de la esencia floral les ayudará a acepta su
realidad, su enfermedad, su dolor, su pobreza, su oscuridad. A aceptarse a sí
mismos y deja de colocar el temor en cosas externas. Sentir miedo es algo
natural y necesario para nuestra protección, pero vivir en el miedo nos bloquea
e impide que llevemos una vida tranquila.
¡¡Veremos qué temes realmente!! ¿No puedes? Te ayudo…
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